El esfuerzo y la intención se agradecen


Sí, es muy difícil hacer cine de terror, sobre todo en Venezuela. Alejandro Hidalgo lo intentó con La Casa del Fin de los Tiempos, y casi le sale, pero el proyecto pudo haber sido mucho mejor. No se puede negar que hay una buena intención y que las ideas son innovadoras. Hay elementos típicos y guardan ciertos detalles. Sin embargo, nosotros los espectadores, después de haber visto tantas cintas pertenecientes al género, no sabemos pasar por alto las fallas. En primer lugar el guion tiene un error: se pasea por el drama, la risa y el suspenso como si no fuese problema. Así que la tensión no logra mantenerse, pues se le da al público mucha tregua con chistes y diálogos que en este caso no pegan. Yo no recuerdo haberme reído con ninguna cinta de terror que haya visto en los últimos años. Aquí son los niños del reparto los que encabezan las "bromitas" que hacen que los espectadores suelten carcajadas y se olviden por un momento de que lo que están viendo tiene que hacerlos brincar de miedo todo el tiempo. Eso sí, los pequeños tienen actuaciones memorables, en especial Rosmel Bustamante, quien hace el papel de Leopoldo. Guillermo García también encabeza el reparto en la piel de un cura que fuma, por cierto, pero bueno...


Luego pasamos a lo que es la historia. Yo tengo que decir, muy humildemente y sin vergüenza, que por poco no la entiendo. Claro, al final hice un esfuerzo y comprendí. Lo que pasa en el argumento algunas cositas carecen de sentido y otras son irrelevantes. Tal vez el director quiso hacer un filme inteligente, para que la gente se rompiera el coco, pero yo sentí mucha inverosimilitud. SPOILER. Ruddy Rodríguez, quien está bastante correcta como Dulce, es una ama de casa acusada de haber matado a su marido y a su hijo. Cuando sale de la cárcel (30 años después) se dedica a contar lo que en verdad pasó. Que fue ella misma estando vieja quien asesinó a su esposo, pero salvó a su hijo para que viajara en el tiempo y viviera en el presente, aunque también logra verlo en el futuro (o pasado, no sé) aún más anciano que ella. ¿Entendieron? Si la respuesta es no, entonces puedo dormir tranquila y saber que no soy tan distinta a los demás. La fotografía, el sonido, el maquillaje y el montaje están excelentes. Se agradece el esfuerzo. Creo que esto es un comienzo, ojalá continuemos mejorando. PD: Los niños no deben decir groserías, no es necesario. ¡Hasta la próxima!



Valoración: 2 de 5


1 Response to "El esfuerzo y la intención se agradecen"

  1. Anónimo Says:
    5 de julio de 2013, 20:15

    La Casa del Fin de los Tiempos. Ópera prima de Alejandro Hidalgo, quien quiso intentar con un género jamás hecho en nuestro país. Lamentablemente, es cierto que la comedia estuvo demás, así como las inconsistencias en los tiempos. Los espectadores nos trasladamos al pasado y luego al presente sin explicación aparente, y las groserías de los niños como sello innegable del cine venezolano. Buenas ideas, con un poco más de práctica haremos terror para exportar!

Publicar un comentario