NO ES PORNOGRAFÍA



Shame significa 'vergüenza', la vergüenza que siente el personaje de Michael Fassbender en la segunda película de Steve McQueen, que se titula precisamente así (Shame). Se trata de una verdadera joya que llega a los diferentes sectores en medio de mucha expectación. No es pornografía, a pesar del desnudo del protagonista, quien mostró su intimidad en pleno. El filme se ha vendido como una historia que presenta a un adicto al sexo, y esas son premisas que alimentan el morbo de los espectadores. Sin embargo, los que asistieron al cine creyendo "otra cosa" salieron devastados. Yo no había visto una cinta tan visceral, intimista, arrebatadora y profunda. Es increíble cómo una escena en la que un hombre mantiene relaciones con dos mujeres puede causar tristeza.



Brandon es un hombre con graves problemas para controlar y disfrutar su vida sexual. Está destinado a sobrevivir sin vinculaciones emocionales. Nunca se ha enamorado y esconde su terrible trauma a una sociedad llena de prejuicios. Se refugia en un placer básico, vacío, salvaje... No puede ser feliz y la desesperanza está por asesinarlo. Merece una mención especial la escena en la que deja en la cama a su compañera de trabajo, pues cree tener cierta conexión con ella, para luego buscar a una prostituta. ¡Increíble! Es propicio entonces describir cuan feroz es la actuación de este actor ignorado injustamente en los Oscar 2012. Él y Carey Mulligan (su hermana en la trama) son una verdadera explosión.


McQueen se arriesgó al dirigir un filme pocas veces visto, en el que no hay cabida para risas o comentarios de doble sentido. Es un ejercicio cinematográfico que profesa tremenda seriedad. Se quedará en la mente del público durante varios días o tal vez semanas. Todos intentarán descifrar los huecos intencionales del guion, los cuales se complementan con un montaje que obedece a la inflexión. Faltando 20 minutos, el largometraje alcanza un clímax duro e incómodo. El dolor en el rostro de Brandon es tan fuerte que quisiéramos ponernos en su lugar, pero es imposible. No hay manera de identificarnos con él. El cierre será -para algunos- un poco frustrante, pero como reseñó Los Angeles Times: "Es una película psicológicamente claustrofóbica, que desnuda a sus personajes literal y figuradamente, dejándolos (y dejándonos) sin nada que esconder".



Valoración: 4.7 de 5


0 Response to "NO ES PORNOGRAFÍA"

Publicar un comentario